La precisión de las comprobaciones de presión depende del manómetro; elegir el correcto es clave para una protección eficaz de los neumáticos. Hay tres tipos principales: medidores digitales, medidores analógicos (de varilla) y medidores de cuadrante. Los medidores digitales son los más populares por su facilidad de uso y precisión (la mayoría mide hasta 0,1 PSI), lo que los hace ideales para principiantes. Los medidores analógicos son asequibles y duraderos, pero requieren una mejor vista para leerlos. Los relojes comparadores ofrecen un equilibrio entre precisión y durabilidad, que a menudo prefieren los mecánicos. Busque manómetros con un rango de PSI que cubra la presión recomendada para su vehículo (normalmente 30-40 PSI para automóviles de pasajeros). Evite los medidores baratos y de baja calidad: pueden tener una diferencia de 2 a 3 PSI, lo que provoca una inflación incorrecta. Para controles frecuentes, invierta en un medidor digital portátil con linterna incorporada (útil en condiciones de poca luz) o un inflador de neumáticos con medidor integrado. Un manómetro confiable le garantiza mantener una presión precisa, protegiendo sus neumáticos y mejorando la seguridad.